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Las Entrañas de la Bestia es el tercer escenario de la campaña de Alarico re-hecha en Age of Empires II: Definitive Edition.
Está basado en la segunda invasión de Alarico a Italia en el año 408 d. C.
Prólogo[]
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Instrucciones del escenario[]
Condiciones iniciales[]
- Edad inicial: Edad de los Castillos
- Recursos iniciales: 1000 comida, 1000 madera, 750 oro, 300 piedra
- Límite de población: 200 (210 en la Edad Imperial)
- Unidades iniciales:
Diferencias entre niveles de dificultad[]
- En la dificultad estándar, Sarus entrena muchas menos unidades y Ataulfo puede encargarse de él prácticamente solo.
Objetivos[]
- Derrotar a Aquileia.
- Derrotar a Cremona.
- Enviar un enviado al emperador.
- Derrotar a Sarus.
Pistas[]
- Los visigodos pueden llegar a la Edad Imperial y mantener una población de 200 habitantes (210 en la Edad Imperial). La pólvora no está disponible para los godos del siglo V.
- Como Italia se ha visto debilitada por varias invasiones germánicas, puedes tomarte tu tiempo para aumentar tus fuerzas; el enemigo tardará en preparar las suyas.
- Evita acercarte a Rávena hasta que el emperador esté dispuesto a hablar con Alarico. Los visigodos no buscan destruir el Imperio Romano, sino simplemente obtener un mejor trato de él. No obstante, saquea las ciudades romanas del norte de Italia para demostrar tu tenacidad.
- La fuerza de los visigodos reside en su número.
Exploradores[]
- Situada en la costa adriática, la ciudad de Aquileia (3, Azul) tiene fortificaciones bastante fuertes. Tomarla con solo infantería y sin armas de asedio puede resultar difícil. Aquileia entrenará a piqueros y ballesteros.
- Al sur de los visigodos se encuentra la ciudad de Cremona (4, Amarillo). Su fuerza reside en su ejército de caballeros, espadachines y escorpiones, que pueden contrarrestar a los huscarles godos.
- Ataulfo (5, Cian) ha tomado el control de parte del ejército godo para ayudar a Alarico. Una vez que sea lo suficientemente fuerte, desplegará el típico torrente de infantería por el que son conocidos los godos, pero hasta ese momento necesitará apoyo y protección.
- Corren rumores de que el comandante godo Sarus (6, Púrpura) se ha unido a los romanos. Es un rival de Alarico desde hace mucho tiempo y lo conoce bien.
Jugadores[]
Jugador[]
- Jugador ( Godos): comienza con una base considerable en el noreste y un castillo al oeste de la base.
Aliado[]
- Ataulfo ( Godos): una base similar a la del jugador y un poco más de fuerzas al sureste del jugador.
Neutral → Enemigo[]
- Sarus ( Godos): controla algunos edificios y unidades dentro del territorio de Ravenna. Después de traicionar al jugador, todos los edificios en la base sur de Ravenna también pasan al control de Sarus, incluido un castillo.
- Ravena ( Romanos ( Italianos antes de Return of Rome)): un jugador en gran parte pasivo que se encuentra en el margen occidental del mapa, al que solo se puede llegar después de derrotar a Aquileia y Cremona, y cruzar un río y luego un estrecho pasaje defendido por torres de vigilancia y soldados. Tiene una base fortificada más grande en una isla al noroeste, y una base más pequeña al sur de esta, que solo está protegida por murallas de empalizada y pasa principalmente al control de Sarus después de su traición. Varios centuriones y legionarios de élite están dispersos por el territorio de Ravenna, mientras que dos flotas de dromones* protegen ambas secciones del río. Después de que Sarus tome la base sur de Ravenna, algunos Centuriones de Élite aterrizarán en la costa norte, cerca de la base inicial del jugador.
Enemigos[]
- Aquileia ( Bizantinos): una gran ciudad fortificada en un archipiélago al este. Es el enemigo más peligroso porque está al sur de la base de Ataulfo, pero también es difícil de asaltar debido a un foso que limita el acceso a algunos puntos de estrangulamiento. Aquileia renunciará cuando su centro urbano y sus dos castillos sean destruidos.
- Cremona ( Italianos): una gran ciudad amurallada semicircular cerca del centro del mapa, al suroeste de las fuerzas godas. Es la más débil de las ciudades italianas. También tiene un pequeño pueblo inactivo al suroeste, cerca del paso a Rávena. Cremona renunciará cuando su centro urbano y su castillo sean destruidos.
Estrategia[]
Los enemigos no solo tardan mucho en atacar (como se indica en las pistas), sino que también se concentran en Ataulf, por lo que el jugador es libre de construir una segunda base al oeste (al norte de Cremona, que es rica en recursos) y listo. Sin embargo, Aquileia debería ser el objetivo prioritario porque está más cerca de Ataulf y es más agresiva. Explora para encontrar su economía fuera de las murallas y arrasarla para debilitar a Aquileia, luego invierte en armas de asedio y Huscarles para abrir una brecha en la Puerta norte y obtener acceso al interior. Ataulf apoyará pero no liderará, ya que la IA entrena principalmente a la infantería y no puede descubrir cómo explotar los puntos débiles en las defensas de Aquileia. Después de conquistar Aquileia, refuerza el ejército con piqueros para defenderse de los caballeros de Cremona y atacarla tanto desde el norte como desde el este.
Una vez que Cremona cae, una caballería de exploración aparece al suroeste y corre para encontrarse con el Emperador Honorio (un centurión imperial) al noroeste. Sin embargo, Sarus traiciona al jugador y mata al explorador a mitad de camino, convirtiéndose él mismo y Ravenna en enemigos. Ravenna luego envía un gran ejército de centuriones de élite y legionarios contra Ataulf, que acaba rápidamente con su infantería y pone en peligro su supervivencia si no se le controla. Después de derrotarlo, Ravenna regresa a una posición pasiva y defensiva. Las siguientes oleadas de ataque son ejércitos góticos más pequeños de Sarus. Incluyen huscarles al principio, pero a medida que pasa el tiempo se convierten casi exclusivamente en campeones y alabarderos.
Construye una tercera base cerca de las ruinas romanas al sur y un castillo en el punto de estrangulamiento que atraviesan los ejércitos de Sarus. Después, usa trabuquetes y unidades a distancia para despejar las torres y los legionarios en el estrecho pasaje que conduce al territorio de Ravenna y luego ataca la base de Sarus con huscarles, campeones y arietes hasta que lo derrotes.
Nota: después de que tanto Aquileia como Cremona sean derrotadas, tanto Ravenna como Sarus no harán nada hasta que el jugador envíe al Explorador a la Puerta de Ravenna para que los traicione. Para evitar que los Centuriones de Élite de Ravenna y la infantería de Sarus (que pueden ser contrarrestados por la infantería del propio jugador) lo tomen por sorpresa, el jugador puede usar esto a su favor para aumentar y entrenar libremente un ejército lo más grande posible (si el jugador entrena un ejército lo suficientemente grande como para alcanzar el límite de población, entonces la victoria está prácticamente garantizada).
Estrategia alternativa[]
Esta es una victoria garantizada, pero algunos jugadores pueden considerarla injusta, ya que, sin lugar a dudas, frustra los disparadores de Sarus hasta que el jugador esté preparado para una victoria rápida.
Sigue todo lo anterior hasta la reunión con el Emperador, incluida la caballería retrasada hasta el Emperador. En lugar de enviar a la caballería de exploración, envía a todo el ejército de Huscarles de élite (deberían ser cerca de 3 grupos de mando completos de 60, con un total de alrededor de 180) y colócalos directamente debajo del centro de la ciudad rojo y cerca de todos los edificios rojos que Saurus convertirá. Si el jugador no está seguro de cuáles son, guarda el juego, revela el mapa, inicia el diálogo y luego recarga. La siguiente etapa no se activará hasta que ese explorador llegue a las puertas de Ravena y Sarus declare su asalto.
Nota: Las fuerzas de Ravenna están configuradas en la posición de No Ataque. No atacarán si el jugador los ataca. Esto se puede usar en beneficio del jugador, pero tenga cuidado: Saurus declarará su asalto si el jugador mata a demasiados de ellos. Primero elimine a los Onagers y a los Centuriones de Élite.
En el momento en que Sarus traicione a Alaric, usa a los Huscarles para destruir los edificios y, especialmente, el Castillo. Ignora a Ravenna, ya que se rendirán una vez que Sarus sea destruido. Una vez que el Centro de la Ciudad, el Castillo y otros edificios militares sean destruidos en los primeros segundos, mata a los Aldeanos y todo lo demás que sea morado. Hay Aldeanos justo al oeste del enclave y construirán un segundo Castillo si no los matan inmediatamente. Después de que Atulf declare que es hora de tomar Roma, el escenario está ganado.
En algunos casos, es posible que los aldeanos de Sarus se nieguen a abandonar los muros de Ravenna. Si esto sucede, recarga y repite el asalto. Mantén a los Huscarles dentro del pequeño enclave hasta que el jugador vea a los aldeanos o la base de un edificio morado. Luego, mátalos antes de que reconstruyan su castillo y centro urbano, ya que movilizarán instantáneamente a los Huscarles de élite.
Return of Rome[]
En Return of Rome, las estrategias anteriores siguen funcionando, pero hay algunos cambios que facilitan el escenario. Los godos ahora tienen acceso a los dromones, lo que significa que pueden usarlos para destruir edificios enemigos con poca oposición.
Para derrotar a Aquileia, construye un muelle al este de la base de Ataulf y construye dos Dromones (no es necesario más, sobre todo porque no podrán llegar a Cremona). Usa los Dromones para destruir el centro de la ciudad de Aquileia y sus dos castillos, lo que hará que se rindan. Ten cuidado con los Mangonels enemigos, que se pueden eliminar usando la habilidad de ataque terrestre.
Contra Cremona, construye un muelle cerca del río entre Cremona y Aquileia. Esta vez, los Dromones no pueden derrotar a Cremona por sí solos, ya que el centro de la ciudad y el castillo de Cremona están fuera de su alcance. Sin embargo, pueden destruir la mayoría de los edificios militares, lo que facilitará que Ataulf y las unidades terrestres del jugador ataquen Cremona. No ataques los edificios de Ravenna todavía, ya que provocará la traición de Sarus.
Después de que tanto Aquileia como Cremona sean derrotadas, el jugador puede usar a los Dromones para destruir algunos de los edificios militares de Sarus (en particular sus cuarteles, para evitar que ataque a la infantería) y para destruir a los Onagros de Ravenna antes de que puedan causar demasiado daño. No hay necesidad de atacar la base de Ravenna, ya que la defienden con sus propios Dromones. Dado que Sarus es mucho menos agresivo ahora, unos pocos Trabuquetes protegidos por campeones en masa son todo lo que se necesita para derrotarlo.
Epílogo[]
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Curiosidades[]
- Este escenario se superpone cronológicamente con los tres primeros de la campaña de Alaric de la edición HD (Todos los caminos conducen a una ciudad sitiada, ¡Legionarios en el horizonte! y ¡Emperador de Occidente!). De ellos, tiene más en común con el tercero, ya que presenta al ejército de Alaric tratando de llegar a Honorio en Rávena y presenta a Sarus como enemigo. Cabe destacar que la campaña rediseñada ignora los bloqueos anteriores de Alaric a Roma, que fueron el tema de la primera mitad de la campaña HD.
- Cremona es un aliado en el tercer escenario de Barbarroja, y Aquileia es un enemigo en el sexto escenario de Atila el Huno. Al igual que en este último, el jugador debe destruir algunas ciudades del norte de Italia antes de intentar llegar a la capital del Imperio Romano de Occidente.
Comparación histórica[]
- A diferencia de El emperador de Occidente, Rávena se describe como una ciudad del interior conectada al mar a través de lagos y ríos. Esto es algo más fiel a la realidad, aunque la Rávena del juego parece estar aún más al interior, en el valle del Po al oeste de Cremona.
- Al llegar a las ruinas, un soldado godo comenta que son restos de su invasión anterior a Italia. De hecho, Alarico invadió Italia por primera vez en el año 401 d. C., pero se fue después de ser derrotado dos veces por Estilicón.
- Otro gobernante godo, Radagaisus, invadió Italia en el año 406, pero fue capturado y ejecutado por los romanos. Los soldados más capaces de Radagaisus fueron obligados a prestar servicio a los romanos y, posteriormente, fueron víctimas de la masacre a la que se hace referencia en las secuencias cinemáticas.
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