Alcazabas es una tecnología única de Age of Empires II: The African Kingdoms para los Bereberes y se puede investigar en el Castillo. Una vez investigado, aumenta la velocidad de trabajo de todos Castillos del equipo en un 25%.
Estrategia[]
Es y debería ser la máxima prioridad del jugador llegar a la Edad de los Castillos, ya que proporcionará en el y todo su equipo, en este caso, una mejora en la velocidad de creación. Incluso si el jugador bereber y/o sus aliados no hacen mucho uso particular de sus unidades únicas, siendo capaz de generar Petardos y Trebuchets a un ritmo más rápido es siempre una buena opción, especialmente si el jugador tiene la costumbre de construir sus castillos cerca de la base enemiga permitiendo al equipo llevar a cabo una mejor caída del Castillo enemigo, por ejemplo. Otro dato interesante de esto es que su efecto se acumula hasta si el equipo contienen dos o más bereberes. Esto hace que enviando a los Trebuchets, Petardos y unidades únicas sean aún más eficaces si todos los jugadores bereberes en un equipo desarrollan Alcazabas. También se acumula hasta con Centralización para aumentar aún más la velocidad de creación de los guerreros Shotelais. También se acumula con la bonificación de los Turcos si otros aliados tienen una unidad de la pólvora como una unidad única del Castillo (como los Españoles o Portugueses).
Bonificación de equipo[]
- Un equipo que contenga Portugueses: Alcazabas se desarrolla un 25% más rápido.
Cambios[]
The African Kingdoms[]
- Inicialmente, Alcazabas aumenta no sólo la velocidad de trabajo de los Castillos en un 25%, sino también la de los castillos del jugador investigador por otro +25% (lo que resulta en un bono total de +56.25%). Con el parche 4.8, sólo afecta a los castillos del jugador investigador por única vez.
Curiosidades[]
- Alcazabas era la única tecnología única común antes de la introducción de la tecnología Papel Moneda en Age of Empires II: Rise of the Rajas.
Historia[]
La alcazaba es una construcción o recinto fortificado de carácter urbano cuya función era servir de residencia a un gobernador para defender presumiblemente un lugar determinado y sus contornos, albergando una guarnición que, con frecuencia, conformaba un pequeño barrio militar con viviendas y servicios, constituyendo una ciudadela. Solían estar asociadas a un alcázar o castillo situado en uno de sus extremos, aunque éste era independiente de la propia alcazaba y del resto de la ciudad, y en caso de asedio, las poblaciones de los núcleos urbanos donde se asentaban buscaban refugio tras las murallas de dichas alcazabas. En el siglo XIX, al conquistar los franceses, mandados por el mariscal Bonrmont la ciudad y territorio de Argel, uno de los fuertes cuyas llaves se entregaron en señal de vasallaje fue el de la Alcazaba, fundada en el siglo XVII. El último rey de Argel, Hiissem Bajá, temiendo la suerte trágica que habían tenido los más de sus predecesores, abandonó el primitivo palacio donde aquellos siempre habían residido y se encerró junto con sus mujeres y tesoros en la Alcazaba, de cuya posición hizo una fortaleza erizada de cañones, prohibiendo aproximarse a ella aun a la misma milicia turca. Los franceses entraron en Argel el 4 de julio de 1850 y al día siguiente por la mañana ocuparon aquella fortaleza que ya había abandonado el rey. Las llaves particulares de las puertas donde estaban hacinadas las riquezas fueron entregadas por el Khamodar o ministro de Hacienda a una comisión nombrada por el mariscal que formalizó el inventario de todas ellas.